
Digiriendo información
Esta sección pretende poner en contexto la realidad de que la información es poderosa. Poderosa para destrozarnos, poderosa para hacernos sentir capaces de coger las riendas de nuestra vida sin delegar en otros. Cada persona es diferente, cada cual necesita información a su medida y a su gusto. Lee más sobre estos temas en las secciones Responsabilidad ¿Quién la asume? y Pruebas durante el embarazo.
Ésta es una especie de introducción a la información que encontrarás en esta página web, a la manera en la que quiero compartir información en ella.
Esta web pretende ser a largo plazo (modestamente por el momento) una "biblioteca" donde todos puedan encontrar información sobre embarazo, parto y maternidad. Me gustaría que esa información englobe no sólo las guías de actuación o consejos estándar, sino que enlace a los muchos autores esparcidos por el mundo que cuestionan la práctica actual y buscan otras formas de trabajar no centrándose en la población como conjunto, sino ajustándose a la situación y el individuo concreto.
Muchos artículos a los que pongo enlace son en inglés ya que las traducciones son escasas y la información de la que disponemos en español es muy limitante. Sé que para muchos leer en Inglés supone un gran esfuerzo, pero hoy en día hay múltiples traductores que pueden hacer esa tarea sencilla. Gracias a ellos el idioma no es una barrera, y el horizonte se expande.
Aunque inicialmente pretendía que esta página estuviera repleta de información no sesgada no tardé en darme cuenta de que sólo los números son objetivos y que con cada palabra que uso se leerá entre líneas mi opinión personal, a veces sutilmente, otras sin maquillaje.
Descartad todo lo que no sea afín a vosotros y sacarle jugo a la información que encaje con vuestra manera de pensar y sentir. Mi tendencia siempre será la de cuestionar ciertos protocolos vigentes, la de sacar a la luz otros puntos de vista, porque mi creencia es que del pensamiento estándar ya hay información suficiente.
Cada uno decide hasta donde sumergirse, si necesita información para tomar decisiones, si dejarse arrastrar por el embarazo, el parto y el postparto por instinto impoluto. El conocimiento nos da tanto poder como tiene la capacidad de preocuparnos. Cada cual puede servirse de información a gusto propio.
No hay nada que crea imprescindible saber para ser padres. Yo espero que cada pareja coja las riendas y pida la información que quiere y no simplemente esperen que el profesional se la vierta encima. Dejemos las sesgadas clases magistrales llenas de alumnos que memorizan sin entender y empecemos a aprender guiados por el interés (¿Oíste alguna vez hablar de Unschooling? éste puede ser un buen momento para descubrir lo que significa aprender guiados por el entusiasmo)
Aquí estoy para que me preguntéis cualquier cosa, ni en una vida tendré todas las respuestas, pero os animo y me comprometo, a ir buscándolas.
Valle, Febrero 2015
Viva la diversidad
Vine de Inglaterra pensando que tenía que dar el mismo servicio y el mismo trato a todas las parejas que atendía, la misma información no sesgada (como si eso existiera de verdad), como un profesor siguiendo un libro de texto y esforzándose para que sus alumnos recuerden lo escuchado.
Con la experiencia acompañando familias no tardé en darme cuenta de que esa información calaba de un modo diferente en cada pareja. Me di cuenta de que debe ser la pareja quien guíe la atención durante el embarazo, el parto y el postparto y no la mejor lista de cosas importantes que toda pareja debe saber, creada por un profesional. Hacerlo para todos igual es un sinsentido, es homogeneizar la complejidad de las relaciones humanas.
Hay quienes necesitan empaparse de información durante el embarazo, saber qué esperar en cada etapa, conocer los detalles de qué hacer en cada situación, conocer datos y estadísticas. Y hay quienes lo único que necesitan es rodearse de confianza. Confianza en sus cuerpos, en la naturaleza a través de ellos, confianza en el fluir de la vida y en que de todas nuestras aventuras saldremos con un aprendizaje bajo el brazo. Muchos de nosotros danzamos de un lado al otro del espectro.
Esta página tiene un poco de ambas caras de la moneda, para saciar esas dos facetas dentro de mi misma, para ofrecer datos, para ayudar a hacer planes, y para confiar en lo que la aventura de ser madres y padres nos depara.
Fuentes de información
Hoy en día tenemos acceso a tantísima información que lo realmente difícil es saber filtrarla, es encontrar el lugar donde se amontona la información que nos es afín, es evitar el bombardeo de historias de terror y sobrevivir al embarazo con la mente sana.
Estamos rodeados de información... que llega a nosotros en múltiples formas, desde diferentes voces y tonos. Voces que apelan a la razón y a la intuición, al paternalismo y a la autogestión, voces que nos hablan desde el miedo o desde la confianza.
La opinión del "experto" es sólo una de esas fuentes de información. Pero ni siquiera esa voz es uniforme, a menudo el consejo de los profesionales varía de unos a otros. Eso nos da la pista de que hay múltiples maneras de afrontar una situación, múltiples maneras correctas, que aparentemente se contradicen aunque cada una de ellas se autoafirme como el "único Dios", la "única verdad".
Esto que lees es sólo una de esas fuentes de información, observa como te sientes leyendo esto, leyendo libros, artículos, estudios, escuchando a los "expertos" dentro y fuera del sistema.
Recolectando información sobre cada tema tomamos decisiones que definen el camino que recorremos.
Decidiendo desde dentro
Todos somos capaces de coger las riendas de nuestra salud, todos somos capaces de decidir el rumbo de nuestra vida, la elección correcta para nosotros y nuestra situación. Os animo a escuchar el podcast de Indie Birth Descubriendo tu talento oculto para tomar la decisión perfecta (para ti) que habla a fondo sobre este tema.
Aunque a menudo encontremos justificaciones racionales para tomar nuestras decisiones, la realidad es que hay un factor emocional que condiciona cada una de ellas. Es esa sensación de que algo es correcto sin saber por qué, esa sensación irracional de que ese es el camino a elegir para nosotros. Intuición es saber sin saber por qué.
Observa como te sientes tú con cada gota de información que baña tu charco, observa cuál es tu verdad, lo que entra en ti dulcemente sin necesidad de razonamiento alguno. Observa lo que tu intuición te dice que es cierto para ti, el lugar al que lleguemos depende de cada uno de nuestros pasos.
Valle, Diciembre 2016