top of page
Dar a Luz en Casa Nace Nace Antea espejo

¿Cómo hacer un tacto?

Escribo esta sección para que cada mujer, si así lo quiere, pueda explorar su cérvix de parto. En este texto encontrarás información práctica de lo que se siente y cómo interpretarlo.

 

Creo que en algunos casos, pocos, saber hacerse un tacto puede ayudarnos a tomar decisiones (por ejemplo cuando se planea un parto hospitalario un tacto puede complementar la información que se obtiene de la actitud).

 

También creo que puede ayudarnos a conocer aún más nuestro cuerpo, que nos ayuda a la autogestión y que hacernos un tacto nos permite disfrutar de la posibilidad de tocar a nuestro bebé con los dedos antes de que éste haya nacido.

Por último antes de empezar, quiero recordar que no es buena idea que nadie haga tactos cuando la bolsa se ha roto. Podéis leer más sobre ese tema en la sección ¡Se ha roto la bolsa! 

Encontrando el cérvix

De ser grueso y protuberante como el glande de un pene, pasa a convertirse en un borde tan fino como una hoja de papel. No se abre en círculos concéntricos como a menudo se describe, sino que se abre de atrás hacia adelante, haciéndose cada vez más accesible.

 

El cérvix es el único agujero que hay dentro de la vagina, si no encontramos ningún agujero, significa que aún está tan al fondo que no merece la pena saber de cuantos centímetros está dilatado. Date una ducha, relájate y más tarde vuelve a intentarlo.

Midiendo dedos

 

Una vez encontrado el agujero valora cuánto está de abierto y cuánto de fácil ha sido encontrarlo (más fácil cuanto más dilatado y por tanto más anterior). Los dedos de cada persona son diferentes así que coge una regla y encuentra tus propias medidas. Pero como guía normalmente funcionan las siguientes mediciones:

 

  • 1 cm = el ancho de 1 uña

  • 2 cm = 2 dedos apretados

  • 3 cm = 2 dedos holgados

  • 4 cm = 2 dedos con el hueco para otro en medio

  • 5/6 cm = un poco más de espacio

 

A partir de los 6 cm ya no se mira la distancia entre los dedos sino los centímetros de borde de cérvix que queda rodeando a la cabeza.

  • 7 cm = 1,5 cm de cérvix por cada lado

  • 8 cm = 1 cm por cada lado

  • 9 cm = ½ cm por cada lado. Reborde de cérvix: cuando en la parte más cercana al pubis hay 1 cm de borde que no existe en los laterales. Considerarlo 9 cm

  • 10 cm = no se toca cérvix por ninguna parte, sólo la cabeza del bebé. A veces al no encontrar agujero por ninguna parte se puede confundir con cuando el cérvix está muy al fondo, pero quien ha estado con la mujer de parto todo el tiempo y haya observado su actitud sabrá diferenciar perfectamente si están al principio o al final del parto

 

Esa confusión ocurre porque al hacer un tacto suele tocarse la cabeza del bebé con una capa de pared vaginal por encima. Cuando la bolsa está íntegra es difícil distinguir entre si la estamos tocando directamente (dilatación completa) o con la vagina de por medio (cérvix casi cerrado muy al fondo).

Hacerlo sin prisas

 

La clave para saber con seguridad lo que se ha notado en un tacto, es estar quieto pero con los dedos dentro durante varias contracciones, para que en cuanto ésta pase hacerlo tomándose todo el tiempo del mundo. La parte más molesta suele ser la sensación de entrar en la vagina, sensación que será mucho más agradable hecha por manos conocidas o las de la propia mujer.

Conclusión

 

Desde mi punto de vista los tactos son una violación de la intimidad cuando los hace un extraño. Pero son una opción más en la libertad de cada mujer. 

 

Creo firmemente que los tactos vaginales son la última opción, así que antes de hacer un tacto deberíamos plantearnos que buscamos con ello, si la información que podamos obtener va a ser realmente útil y si hay maneras menos invasivas de obtener respuestas. 

 

Recuerda que los tactos nos hablan de lo que esta ocurriendo en este instante, pero son incapaces de predecir lo que ocurrirá en unos minutos o unas horas.

 

 

Valle, Enero 2017

bottom of page